
|
|
Rosario, Argentina 25/04/2025
Noticias
[22/04/2025]
LA IMPORTACIÓN DE USADOS PONE EN RIEGO AL CLUSTER DE LA MAQUINARIA AGRÍCOLA SANTAFESINA
El ministro de Desarrollo Productivo de Santa Fe, Gustavo Puccini, salió a defender la industria santafesina y consideró que “la apertura de importaciones para bienes de capital usado puede transformarse en un riesgo permanente para los clusters productivos asentados hace décadas en el país y principalmente en la provincia”. Especial impacto en la industria de la maquinaria agrícola.
El ministro advirtió que la resolución tomada por el gobierno nacional afecta a “entramados productivos, compuesto por pymes en su mayoría, que nacieron en un garage con una pequeña máquina y fueron creciendo, con décadas de esfuerzo familiar, inversiones y desarrollo para convertirse en los hacedores de un país que apunta a generar empleo, incorporar tecnología y marcar estándares de calidad internacional”.
Uno de los puntos que mas preocupa al gobierno de la provincia es el de la maquinaria agrícola. Es que Santa Fe concentra más de 1.000 empresas de maquinaria agrícola, casi la mitad de las que existen en el país, generando entre 10.000 y 12.000 empleos directos, con inversiones sostenidas en modernización, capacitación y desarrollo, lo que le permite competir en calidad a nivel internacional.
Puccini señaló que desde Santa Fe, después de hablar con fabricantes y representantes de las cámaras que nuclean al sector, y analizar la situación se armó una propuesta que incluye agregar el régimen de comprobación de destino, es decir, garantizar la trazabilidad de ese bien importado, que realmente vaya al usuario final.
También se busca estudiar la corrección del saldo técnico de IVA, ya que los fabricantes compran sus insumos al 21% y a la hora de vender se toma un 10,5%, lo que genera un crédito fiscal que termina impactando en los costos. Si el IVA se redujera al 10,5% para la compra, estarían en igualdad de condiciones con los que importen maquinaria usada.
Otro eje de trabajo es reducir aranceles para la importación de insumos para la producción de maquinaria, que hoy rondan entre el 10,8 y el 18% de acuerdo al insumo, esto impacta directamente en el precio final de venta, e incorporar controles fitosanitarios para los bienes importados con el fin de resguardar la sanidad vegetal de nuestros cultivos.
“Desde Santa Fe y el interior productivo proponemos otro camino: un modelo de desarrollo federal, con reglas claras, apoyo a la innovación y una visión que no atente contra la industria. Si lo que queremos es darle competitividad y rentabilidad al productor, es esencial eliminar las retenciones. Producir en Argentina debe valer la pena”, subrayó Puccini.
La realidad de Santa Fe
“Todos coincidimos en que hay que construir una Argentina menos burocrática, más competitiva, con oportunidades para que los productores trabajen de la mejor manera posible y saquen la mayor rentabilidad de su tierra. Pero en ese camino, tenemos que cuidar lo que llevó décadas construir y acompañarlos en la reconversión, equilibrando la balanza y que los beneficios de la motosierra alcancen también a los que producen maquinaria.
Si esto lo usamos para modernizar la tecnológica de nuestro sector metalmecánico, dar un salto competitivo y para aumentar la productividad de las economías regionales bienvenido, pero si lo usamos para desmontar un eslabón clave de una cadena en la que tenemos potencial, sería un error”, indicó Puccini.
Para el ministro “la apertura comercial debe equilibrar competitividad y crecimiento industrial en un año que la industria creció menos y la importación fue superior”.
“No podemos validar la destrucción en las capacidades productivas de agregado de valor. Lo que tenemos que resolver son las asimetrías con el resto del mundo para que nuestras empresas compitan. No queremos que nuestro país, después de décadas de construir liderazgos y calidad en la fabricación de maquinaria, termine siendo el patio de descarte de usados del mundo”, subrayó Puccini.
En ese sentido, el ministro apuntó que “la incorporación de maquinaria usada no solo atenta contra la modernización del parque local sino que además ralentiza el desarrollo productivo local y favorece a los países exportadores que logran desprenderse de equipos obsoletos, vendiéndolos como si fueran bienes competitivos”.
“Todavía estamos a tiempo de corregir el rumbo del decreto 273/2025, con algunas modificaciones para acompañar a los fabricantes nacionales y tomar medidas que les garanticen competitividad frente al ingreso de usados”, precisó.
Fuente: Agro Clave
|